Últimamente los operadores nos tienen acostumbrados a sus declaraciones en torno a la neutralidad de la red, bueno, más bien a sus aspiraciones para cobrar un peaje a los proveedores de contenidos por el uso de sus redes ya que consideran que no están percibiendo lo suficiente como para amortizar sus inversiones o invertir en redes de nueva generación. El gobierno español, hasta ahora, siempre ha hecho declaraciones decantándose por la autorregulación, es decir, que los operadores y los proveedores lleguen a un acuerdo y, precisamente, decimos "hasta ahora" porque ayer, el recién nombrado Secretario de Estado de Telecomunicaciones y Sociedad de la Información, Juan Junquera, declaró que la imposición de una tasa, por parte de los operadores, a los proveedores de contenidos no es una respuesta válida al crecimiento del tráfico de datos, ni a la inversión que deberán hacer las compañías para acondicionar las redes.
> No confío en la autoregulación. Estamos hablando de un mercado muy competitivo en el que se necesitan una reglas básicas
Las declaraciones, hechas en el marco de un evento sobre la industria de las telecomunicaciones celebradas en una escuela de negocios, pusieron en relieve que una autorregulación del sector no era viable, por tanto, era tarea de los gobiernos apostar por la neutralidad de la red. Para que pudiese existir una autorregulación, según comentó, tendría que darse un escenario en el que ninguno de los operadores de telecomunicaciones fuese demasiado fuerte, algo que no existe en la actualidad y que podría derivar en un operador excesivamente fuerte que dominase todo el mercado.
El Secretario de Estado, además, comentó que tienen previstas reuniones con los distintos operadores para abordar este asunto aunque, por ahora, las reuniones mantenidas tan sólo son de carácter interno. Eso sí, también quiso dejar claro que aunque se reclame que la neutralidad de la red sea un derecho recogido en el ordenamiento jurídico de cada país, los Estados necesitarán la ayuda de la Unión Europea para que publique una decisión firme sin que se tenga que esperar a ver qué pasa en Estados Unidos.
> Jugamos un mundial y los elementos que tenemos el Estado se quedan cortos. Necesitamos herramientas globales
En los tiempos que corren, la verdad, es que no sé si tomarme esto con alegría o con cierta desconfianza porque siempre que se le ha preguntado al gobierno por esta cuestión o bien ha lanzado evasivas o, por el contrario, se ha decantado siempre por la posición de los operadores. Siendo optimistas, creo que si esta es la nueva actitud de los responsables de regular las telecomunicaciones en España, el cambio parece que ha sido para mejor pero, lógicamente, más allá de las buenas intenciones están los hechos que son, precisamente, los que tenemos que ver materializarse.
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