Ayer, el ex-CEO de Google, Eric Schmidt participó en el D9, el evento anual de All Things Digital, y, la verdad, es que comentó su visión sobre el mundo de las empresas de Internet que no tienen desperdicio alguno. Realmente, alguien como Schmidt, que ha gobernado el barco de Google durante tanto tiempo, puede enseñarnos cosas muy interesantes sobre el sector tecnológico y los negocios, tanto en éxitos como en fracasos. Dentro de su visión sobre las empresas de Internet, Schmidt reconoce el éxito de las redes sociales, especialmente el de Facebook, empresa a la que reconoce su trabajo.
De hecho, dentro del campo de la web social, tras varios intentos, Google no ha terminado de despegar y, precisamente, parece que es uno de los objetivos de la compañía en esta nueva era. En estos fracasos, el ex-CEO de Google ve un culpable: él mismo.
> Yo sabía muy bien que tenía que hacer algo y no lo hice. Un director general debe asumir la responsabilidad. Metí la pata
Se suele decir que si no puedes vencer a tu enemigo quizás puedas unirte a él y, quizás, aplicando esta máxima, Eric Schmidt aseguró que le gustaría que Google y Facebook trabajasen juntas, si bien hasta ahora no han tenido ocasión de hacerlo. Google no quiere competir con Facebook, aseguró, porque ambas compañías tienen objetivos diferentes pero eso no quita que puedan encontrar objetivos comunes, por ejemplo, si Facebook pusiera a la disposición de otras compañías y servicios algunas de sus funcionalidades, porque así toda la industria se beneficiaría de ello:
> Facebook es la principal forma de desambiguar a la gente. Históricamente, en la red un servicio tan fundamental como ese no debería ser propiedad de una única compañía. Creo que la industria se beneficiaría de una alternativa a eso... La identidad es algo muy importante porque en el mundo online la gente necesita saber con quién está tratando. [...] También lo es para Google, podemos ofrecer mejores resultados cuanto mejor conozcamos a los usuarios.
En otro orden de cosas, Eric Schmidt ve que la industria de Internet se encuentra gobernada por cuatro "superpotencias", a las que denominó "el club de la cuatro", es decir, cuatro empresas que poseen unas plataformas y un lugar en el mercado que difícilmente puede ser desbancado. ¿Y quiénes son esta cuatro empresas tan poderosas? Pues, lógicamente, Google en el ámbito de la información y las búsquedas, Amazon en el sector del comercio electrónico, Facebook en el campo de la identidad digital y Apple en el sector de los productos de consumo. Empresas que, entre las cuatro, suman un valor de más de 500.000 millones de dólares.
> En nuestra industria nunca hemos tenido cuatro empresas en crecimiento como estas, teniendo en cuenta el crecimiento de clientes, de flujo de caja, de penetración, de acuerdos, de herramientas de desarrollo, etc. Son grandes marcas de consumo que traen algo único (la tienda más grande del mundo, la fuente del conocimiento más completa, la fabricación de productos excelentes y, en el caso de Facebook, todos los amigos que hemos tenido, incluidos los que apenas recordamos).
Según Schmidt este club podría ampliarse con dos socios más, Twitter y PayPal, sin embargo, los viejos líderes de la industria, IBM y Microsoft, ya no tienen cabida. De hecho, en Microsoft se paró un momento para subrayar que su pérdida de peso se debe, principalmente, a su falta de impulso para conseguir que los consumidores adquieran y usen sus productos. Sí que alaba los éxitos de Microsoft en el sector del ocio con Xbox, sin embargo, en líneas generales, los pesos pesados de Microsoft siguen siendo Office y Windows, por lo que al final, siguen estando anclados en los mismos productos.
Sobre las relaciones entre los miembros de este club, Schmidt declaró que, obviamente, compiten entre sí pero siguen teniendo proyectos comunes, por ejemplo, Apple integra en iOS los mapas de Google si bien ambas empresas tienen puntos de vista distintos en cuanto a modelos de mercado se refiere.
De todo lo comentado, fundamentalmente me quedaría con dos detalles. Por un lado, el reconocimiento a Facebook y los fallos de Google en el campo de la web social, algo que era evidente y que, además, le ha supuesto a la compañía de Mountain View algún que otro traspiés. Además, tras expresar este manifiesto interés por trabajar con Facebook, el hecho de que Microsoft posea el 1,6% de la compañía de Mark Zuckerberg y la red social tenga suscrito un acuerdo con Bing, limita bastante cualquier tipo de acuerdo con Google.
Por otro lado, el "nuevo orden" de las grandes empresas es muy interesante. En un mundo que antaño era dominado por Google, Yahoo! y Microsoft, tan sólo Google ha sido capaz de evolucionar y mantener su posición en el mercado, que ahora es compartida por otros actores que, poco a poco, han sabido coronarse como los referentes de su campo: Facebook, Apple y Amazon.
Como dice la canción del gran Bob Dylan, "things have changed"
Imágenes: AllThingsDigital