Al hablar de OS X, una de las cualidades más comentadas es la seguridad que ofrece. Si bien esto es cierto, que un Mac sea seguro no lo hace invencible ni inexpugnable. Entre las medidas de seguridad en Mac, destacan la posibilidad de cifrar el contenido del disco duro, el análisis de las descargas en busca de *malware* y, en especial, su cortafuegos, activado por defecto. El cortafuegos de Mac OS X es muy seguro y fácil de usar, pero si quieres opciones más avanzadas como conocer las conexiones entrantes y salientes en tiempo real o bloquear accesos específicos de una aplicación a una IP concreta, necesitas un cortafuegos más avanzado como el que te presentamos, Little Snitch.
Antes de conocer Little Snitch, cabe preguntarse qué es un cortafuegos y qué hace por nosotros. Un cortafuegos, como indica su propio nombre, sirve de filtro entre tu ordenador e Internet, bloqueando o permitiendo cualquier conexión (entrante o saliente) que se produzca. Por ejemplo, al acceder a Bitelia, tu navegador ha realizado una conexión saliente al teclear la dirección y una entrante al descarga el contenido de la página (imágenes, texto, enlaces...). En resumen, un cortafuegos, como Little Snitch, tiene la misión de evitar conexiones no deseadas o peligrosas de Internet, manteniendo a salvo la seguridad en tu Mac.
Las ventajas de Little Snitch
* Muestra información en tiempo real de las conexiones entrantes y salientes y de qué aplicaciones realizan esas conexiones.
* Permite bloquear conexiones concretas pero permitir otras de una misma aplicación.
* Permite crear reglas específicas filtrando por IP o dominio.
* Tiene un botón del pánico, llamado Silent Mode, para bloquear todas las conexiones en caso de emergencia.
* Puedes probarlo de forma gratuita.
Los inconvenientes de Little Snitch
Tienes que permitir o rechazar las conexiones a mano la primera vez que usas Little Snitch.
Crear reglas correctamente requiere tiempo.
Si quieres usarlo sin limitaciones, tendrás que comprarlo* por 29.95 € / US$39.
Puesta a punto de Little Snitch
La instalación de Little Snitch es muy sencilla gracias a su asistente. Pero en caso que quieras desinstalarlo, no basta con hacerlo como las demás aplicaciones, arrastrando el instalador a la Papelera: necesitarás el desinstalador que viene con el instalador. Una vez finaliza el proceso, Little Snitch te pide reiniciar tu Mac.
A partir de ese momento, tu nuevo cortafuegos se iniciará automáticamente junto con OS X. En la barra de menú aparecerá un icono mostrando con un gráfico verde y rojo las entradas y salidas de conexiones. Colocando el cursor del ratón encima, aparecerá una ventana transparente mostrando en tiempo real las conexiones y las aplicaciones implicadas.
Algo que puede resultar molesto de Little Snitch es que las primeras veces te preguntará constantemente si quieres permitir (Allow) o denegar (Deny) las conexiones. Por suerte, muestra de manera muy gráfica qué aplicación realiza la conexión y hacia dónde.
En cada petición de acceso a una conexión, podrás escoger entre denegarla (Deny) o permitirla (Allow) para siempre (Forever) o sólo en esa ocasión (Until Quit). Además, puedes permitir cualquier conexión (Any Connection) o especificar únicamente ese puerto, esa IP o ambos.
Una vez hayas habilitado o denegado las principales conexiones, Little Snitch ya no te molestará y se limitará a mantener la seguridad en tu Mac sin tu intervención y evitarás conexiones potencialmente peligrosas o molestas.