Como hemos comentado muchas veces, 2011 es un año que pasará a la historia en el ámbito de la telefonía móvil como el de la guerra de patentes. Fusiones, adquisiciones y alianzas estratégicas dotan a los principales contendientes del sector de importantes herramientas a la hora no sólo de desarrollar software y funcionalidades para dispositivos móviles, sino también a la hora de emprender acciones legales contra otros fabricantes.

La adquisición del año ha sido la de Motorola Mobility por parte de Google. Los de Mountain View se armaban así y se cubrían las espaldas contra Apple y otros fabricantes de cara a no sólo no ser demandados sino de tener la posibilidad de hacerlo. Un puñado de patentes que además obtenían apoyo con otras tantas por parte de HTC, uno de sus aliados, en unas operaciones que no son del todo moralmente correctas.

Dicha adquisición se anunció a bombo y platillo y aunque está en proceso, aún necesita la aprobación de la Union Europea de cara a que pueda hacerse efectiva. Meses después sabemos que dicha decisión no llegará hasta enero del año que viene, por lo que Google tendrá que esperar.

Concretamente la fecha marcada es el 10 de enero de 2012. La Union Europea tendrá que aprobar o rechazar una adquisición que ha sido valorada en 125.000 millones de dólares.

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