En Facebook, además de los perfiles de nuestros "amigos" podemos encontrar otros tipos de perfiles, los grupos y las páginas. En ambos casos, son perfiles que no están asociados a personas físicas y que, en el caso de los grupos, muestran la actividad de grupos de personas que se unen bajo una temática común y sin un afán concreto de promoción, y, en el caso de las páginas, al estar orientados hacia la promoción, permiten el uso de algunas herramientas que enriquecen, un poco, la experiencia de uso.
Alrededor de las páginas de Facebook se puede generar mucho movimiento (participación, contenidos, aplicaciones, etc), en definitiva, un tráfico que permita que nuestra página sea conocida y, por tanto, nos sirva como plataforma de actuación de nuestra empresa, producto, servicio o, directamente, un canal en el que promocionar nuestro sitio web. En resumen, dado que las páginas de Facebook pueden ser una interesante plataforma con la que promocionar nuestros proyectos, vamos a revisar algunas acciones con las que podremos revitalizar nuestra página y, por tanto, mejorar nuestra presencia en esta red social.
Personaliza tu página
Aunque en Facebook esté todo muy tabulado y homogéneo, tenemos cierto grado de flexibilidad con el que nos podemos mover e intentar marcar un poco la diferencia. Para empezar, desde que se puso en marcha el nuevo diseño de las páginas, tenemos a nuestra disposición una fila de imágenes en la parte superior con la que podemos jugar y dar rienda suelta a nuestra imaginación, usándola para montar un collage o un avance de nuestro catálogo de productos.
Por otro lado, la imagen representativa ocupa un lugar destacado en nuestra página, por tanto, es aconsejable poner cierto esmero a la hora diseñar o componer la imagen que colocaremos en ese sitio. Esa será la imagen que represente nuestra página, por tanto, deberá ser reconocible y estar alineada con la imagen de nuestra empresa, producto o nuestra web. Teniendo en cuenta que contamos con 540px de alto y 180px de ancho como máximo, tenemos un margen interesante para crear una imagen difícil de olvidar.
Además, una característica muy interesante de las páginas es la posibilidad de poder seleccionar la landing page, es decir, que podemos elegir cuál será la sección en la que aterrizarán nuestras visitas y, lógicamente, no tiene por qué ser el muro sino que podemos programar una página de inicio personalizada que sea la que de la bienvenida a nuestros visitantes.
Finalmente, la elección de la url es fundamental porque no podremos cambiarla una vez que superemos los 100 seguidores. ¿Qué nombre elegir? Pues lo mejor es pensar en nuestros usuarios e imaginar por qué nombre nos van a buscar o cuáles son los conceptos que mejor nos identifican. Si elegimos mal el nombre, nuestros usuarios no nos encontrarán fácilmente y, claro está, eso afectará al número de visitas de la página.
Dótala de contenidos
Si nos decidimos crear una página en Facebook estamos adquiriendo un compromiso con nuestra audiencia y nos estamos comprometiendo a ofrecer contenidos de interés para los usuarios que han decidido seguirnos.
Si, por ejemplo, contamos con un perfil en Twitter o contamos con un blog o una web que tenga un RSS, podemos aprovechar estos movimientos e insertarlos en nuestra página, de manera que se automatice la publicación de contenidos. Sin embargo, aunque esta sea una manera bastante cómoda de empezar, creo que no debemos abusar de la automatización y deberíamos complementar estas publicaciones automáticas con publicaciones específicas para Facebook.
Imágenes, encuestas, actualizaciones de estado, recomendaciones, eventos, tenemos una buena colección de herramientas con las que añadir contenidos a nuestra página y darle cierto movimiento.
Interactúa con tu audiencia y fomenta la participación
Uno de los términos que se suelen usar sobre las redes sociales es el de "conversación". De nada sirve tener una página en Facebook en la que publicamos cosas y, luego, no nos importa lo que dicen los usuarios que nos siguen. Es importante ofrecerles contenidos de interés, pero también lo es estar atentos a sus opiniones, conversar con ellos, contestar sus cuestiones, etc.
Si lo único que hacemos es publicar lo buenos que son nuestros productos o las novedades de nuestros servicios, al final, la gente se terminará cansando de tanta autopromoción y tanto monólogo. No siempre tenemos que hablar de nosotros mismos, también podemos compartir enlaces o vídeos de otras fuentes que tengan una temática relacionada con nuestra actividad y, lo más importante, hay que evitar estar siempre alabando nuestros productos y haciendo promoción continua de éstos.
Añade nuevos recursos
Además de crear una landing page, podemos mejorar nuestra página utilizando aplicaciones u otros recursos que nos ayuden a mejorar nuestra conexión con la audiencia y a fomentar la participación y el diálogo. A nuestra disposición tenemos los foros de discusión y, más recientemente, Facebook Questions que también puede revitalizar la participación de los usuarios en las páginas.
Nuestra página puede ser un buen sitio en el que concentrar toda nuestra presencia en la red (YouTube, Flickr, SlideShare, un blog o una página web corporativa, Twitter, etc) y, prácticamente, vamos a poder encontrar una aplicación que sea capaz de trasladar todo este contenido, disperso por la red, hacia nuestra página, por lo que podremos enriquecer mucho más la oferta de recursos que ofrecemos a los usuarios.
Imagen: Safety Web