Si por algo era conocido el proyecto Tor era, precisamente, por ofrecernos un servicio de proxy para realizar una navegación anónima y segura y, por tanto, saltarnos cualquier tipo de cortafuegos o el intento de identificación de los usuarios que acceden a determinados sitios en la web. Esta herramienta, además de ser utilizada en empresas con cierto pavor al uso de redes sociales por sus empleados, era una auténtica válvula de escape y, por tanto, un acceso a la libertad de la red, en países que censuran y controlan Internet pero, tristemente, parece ser que "esta fuga" de disidentes va a ser eliminada porque Irán habría sido capaz de descifrar las comunicaciones de Tor eliminando, así, el anonimato de los usuarios.
Según el propio equipo de desarrollo de Tor, Irán habría implementado un mecanismo que permitiria a su ciberpolicía identificar a los usuarios del país que utilizan esta red y, además, descifrar el tráfico que estuviesen cursando, algo que, en el fondo, se esperaba puesto que, en 2009, el New York Times ya informó de la adquisición, por parte de Irán, de equipamiento de Nokia Siemens Networks para realizar inspección profunda de paquetes (Deep Packet Inspection - DEP).
De hecho, según el propio equipo de Tor, en Irán existirían unas 2.800 personas que utilizarán el servicio, 2.800 ciudadanos iraníes cuya privacidad habría quedado al descubierto y, por tanto, bajo la atenta mirada del "gran hermano" iraní. En definitiva, Irán pega un salto cualitativo en su capacidad de controlar e identificar usuarios de la red, quedando al nivel técnico de China o Estados Unidos.
Actualización: Pues según parece, la gente de Tor se puso manos a la obra y solventó el problema, al menos, eso es lo que ha declarado Andrew Lewman, Director Ejecutivo de Tor, a TechEye que tras la controversia generada por la noticia relativa a Irán (y publicada en varios medios) ha salido en defensa del proyecto indicando que, aunque este hecho haya salido a la luz ahora, el problema fue solventado hace un par de meses, por lo que los usuarios del servicio pueden estar tranquilos, sobre todo los de Irán.
En cualquier caso, aunque el problema haya sido solventado, me llaman la atención dos detalles de este caso. Por un lado, que una empresa Europea haya sido la que haya provisto a Irán de los medios que le permitieron identificar a los usuarios de Tor de su territorio. Por otro lado, que hasta que no ha salido este caso publicado por el Daily Telegraph, desde Tor no se había hecho público este caso ni su posterior solución.