En los últimos años hemos podido observar como las campañas publicitarias daban un giro de 360 grados a sus canales de transmisión antiguos. Primero fue en Internet y los servicios de publicidad online que ofrecía en sus comienzos, para luego pasar a las redes sociales y portales de vídeo como YouTube, donde se podía acceder casi al instante a material de publicidad que acababa de ser lanzado.
Para poner remedio a la situación, el regulador británico (ASA) acaba de incluir a las redes sociales al conjunto de lugares de vigilancia "potenciales" de marketing online desleal, una mira bajo el escrutinio de las autoridades con la que a partir de ahora podrán vetar contenidos alojados en Twitter o Facebook si lo requirieran.
La inclusión de las redes sociales se debe a las más de 4.500 quejas de las que han sido objeto las 2.0 desde el 2008. Una respuesta de la industria de la publicidad en el Reino Unido que se había quedado en sus términos obsoleta, ya que sus regulaciones se extendían hasta la comercialización de la televisión tradicional y los anuncios pagados online.
La nueva regulación permitirá a la ASA censurar todo tipo de tácticas online que se encuentran diariamente en las redes sociales, sobre todo las denuncias sobre comercialización no pagada de alojamientos como ocurre en Twitter y Facebook, que a su vez tienen el pago promocionado cada vez más estandarizado y en auge.
La ASA también ha querido aclarar que no censurará al ciudadano que comparta material que previamente ha sido prohibido, es decir, sólo se dirigirá a las compañías que utilicen las promociones de manera desleal. También aclaró el motivo de esta actualización:
Extender las funciones del mundo online ha sido para la ASA una de las prioridades en el Reino Unido. Nuestro objetivo ha sido extender en Internet los principios que ya estaban establecidos en nuestro sistema, de manera que los consumidores estén protegidos y exista una competencia leal