Si consideramos que en España "disfrutamos" de las conexiones a Internet de mayor coste en toda Europa y a velocidades inferiores a la media europea, realmente no termino de entender las últimas declaraciones de Julio Linares, consejero delegado de Telefónica.
Desde Telefónica, principal proveedor de las infraestructuras que dan acceso a Internet en España, están dispuestos a debatir dos aspectos fundamentales de Internet: la neutralidad de la Red y el acceso a una tarifa plana universal.
Del primer aspecto ya se ha hablado largo y tendido muy recientemente, a raíz del polémico acuerdo de colaboración de Google y Verizon sobre la neutralidad de la Red, por lo que hablemos del detonante de esta noticia: la "viabilidad" de las tarifas planas en España.
Según el actual consejero delegado de Teléfonica, el consumo de Internet desde ordenadores y dispositivos móviles está creciendo de tal forma que la infraestructura disponible será incapaz de soportarla en un futuro cercano. Motivo por el que apuestan por la eliminación de las tarifas planas y regresar a las fórmulas de facturación por consumo. Eso sin olvidar la propuesta de cobrar a los buscadores por su uso de las infraestructuras de Internet, apunte que conocimos hace algunos meses de la mano de la propia Telefónica.
Lo curioso es que a las pocas horas de hacer estas declaraciones, Julio Linares ha tenido que matizar sus propias palabras alegando que:
Telefónica va a seguir utilizando la tarifa plana, lo único que nos preocupa es el uso ilimitado que hacen algunos clientes de ellas.
En estos casos siempre es necesario hacer comparaciones con el "mundo real". Esto es como si en lugar de invertir en nuevas carreteras más modernas y anchas, se quisiera cobrar un "plus" a los que más conducen y así reducir el consumo. La pregunta es, ¿se quedará Telefónica sola en esta propuesta o la apoyarán el resto de proveedores?. Conociendo cómo se mueven unos y otros, miedo me da la respuesta, aunque supongo que servicios de streaming como por ejemplo YouTube y Spotify, tendrán mucho por decir referente a todo este asunto.
Vía: El País